La episiotomía es el nombre médico que recibe el corte que se realiza en el periné de la mujer en el parto. Se realiza con el fin de facilitar la expulsión del bebé, y en la mayoría de partos en los que el uso de instrumental como fórceps o ventosas, es necesario.
Si el periné (región anatómica correspondiente a la zona del suelo o piso pélvico) no es lo suficientemente elástico y/o está bien tonificado, es muy probable que la mujer sufra un desgarro, y ante la posibilidad de un “mal desgarro” los ginecólogos prefieren hacer un corte controlado o episiotomía.
Se ha demostrado que una buena preparación del periné para el momento del parto hace más improbable la necesidad de realizar este corte, evitando así los temidos “puntos” del postparto.
Preparación para evitar la episiotomía
Esta preparación incluye el masaje perineal, un masaje especifico que se realiza en consulta para dar elasticidad a la musculatura, y que una vez aprendido lo puede realizar la propia embarazada o su pareja.
También se ha demostrado que si la manera y la posición que adoptemos a la hora de empujar en el parto son correctas, se reduce notablemente la probabilidad de que la mujer sufra un desgarro. Sin embargo, si realizamos un pujo reteniendo mucho tiempo el aire, y si además nos incorporamos para empujar, la fuerza que tiene que soportar nuestro periné es notablemente superior a la que debiera y para la que está diseñado, además del cansancio y el esfuerzo que supone para la madre, la cual, en este momento del parto, suele estar ya bastante agotada. Por eso, actualmente se está tendiendo a realizar pujos que respeten la fisiología de la mujer en este momento, pujos o esfuerzos realizados en espiración, que disminuyen de manera significativa la presión abdominal. También es importante realizar pequeños cambios en la posición que permitan que la pelvis quede lo más libre posible, sin bloquear el sacro y el coxis y que la apertura del estrecho inferior de la pelvis sea amplia. Aprender este tipo de pujo puede ser de gran utilidad en esta última etapa del parto.
Factores que favorecen la episiotomía
Lógicamente hay otros factores que también influyen y sobre los que no tenemos poder de actuación como el tamaño de la cabeza del bebé, pero sin duda una buena preparación facilitará las cosas.
Si no hemos podido evitar la episiotomía, es conveniente trabajarla en el postparto, desde el mismo momento de su cicatrización para evitar posibles adherencias que puedan perjudicar la fisiología del periné sobre todo en lo que a nivel sexual se refiere.
Para más información también pueden acudir a: www.episiotomia.info