Si estás embarazada vigila bien tu dieta si quieres que tu gestación llegue a buen término. Un estudio publicado en el último ‘British Medical Journal’ constata que la dieta rica en verduras, frutas y granos enteros está vinculada a un menor riesgo de parto prematuro.
Las mujeres embarazadas que comen una «dieta rica en los alimentos prescritos y que beben agua suficiente tienen una reducción significativa del riesgo de dar a luz antes de tiempo”, sugiere el trabajo.
Asimismo, seguir un patrón dietético tradicional de patatas y verduras cocidas y pescado también se relacionó con un riesgo significativamente menor entre las parturientas.
Aunque estos resultados no pueden establecer la causalidad entre la dieta y menores probabilidades de parto prematuro, apoyan el consejo dietético a las mujeres embarazadas a secundarla.
El parto prematuro (antes de las 37 semanas de gestación) se asocia con un peso significativo bajo del neonato, más riesgo de problemas de salud y es, además, la razón del 75% de todas las muertes de recién nacidos.
Los investigadores, un grupo internacional en el que han participado científicos de Suecia, Noruega e Islandia, han llegado a estas conclusiones tras analizar los datos del Estudio de Cohorte de Madres y Niños de Noruega en el que se han estudiado los nacimientos prematuros entre 66.000 mujeres entre 2002 y 2008. Las participantes, sin diabetes y cuyo parto fue natural, rellenaron un cuestionario sobre la frecuencia de consumo de durante los primeros cuatro o cinco meses de embarazo.
Los científicos tuvieron en cuenta además datos que podían alterar los resultados como, la edad de la madre, antecedentes de parte prematuro y nivel de educación.
Se identificaron tres patrones dietéticos distintos, interpretados como «prudente » (verduras, frutas , aceites, agua como bebida, cereales integrales, pollo y pan rico en fibra ); «occidental» (aperitivos salados y dulces, pan blanco, postres, productos cárnicos procesados ) y » tradicionales» (patatas, pescado, verduras cocidas y leche baja en grasa).
Entre las 66.000 mujeres embarazadas, el parto prematuro se produjo en 3.505 (5,3% de los casos).
Después de tener en cuenta todos los factores, el equipo encontró que un patrón de dieta «prudente» en general se asoció con una reducción significativa del riesgo de parto prematuro, especialmente entre las mujeres que tienen su primer bebé. También encontraron una reducción significativa de dicho riesgo para el patrón de dieta «tradicional». Sin embargo, el de dieta «occidental» no se asoció de forma independiente con menor probabilidades de tener un hijo antes de tiempo.
Por lo tanto, es importante excluir totalmente de la dieta los alimentos procesados, la comida rápida y la comida ‘basura’.
Aunque los autores reconocen que no se puede sacar una relación directa (causal) entre la dieta y una reducción del riesgo de parto prematuro, indican que los datos invitan a que los médicos dispongan de más evidencias para las recomendaciones dietéticas de sus pacientes.
En un editorial que acompaña al estudio, el profesor Lucilla Poston del King College de Londres, asevera que la alimentación saludable en el embarazo es siempre una buena idea.
De hecho, esta investigadora apunta varios estudios anteriores que han destacado el beneficio de una dieta rica en frutas y / o verduras en la prevención del parto prematuro, y dice que es aconsejable que los profesionales de salud refuercen el mensaje de dieta sana en las mujeres embarazadas.
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